El proyecto procura reducir de modo progresivo un déficit que hoy alcanza a U$S550 millones que pagamos todos y todas las ciudadanos/as y qué podría llegar a U$S700 millones en 2020 de no prosperar la reforma prevista.
El senador Juan Castillo fue el miembro informante del proyecto y en su intervención hizo referencia a los beneficios que tienen los militares a la hora de retirarse en comparación con el resto de las cajas. Sostuvo que con la aprobación de este proyecto “vamos camino a construir una sociedad más justa, más integrada, más inclusiva. Esto también se inscribe en ese proceso de no tener dos categorías de ciudadanos”
Por su parte, en su intervención la senadora Daniela Payssé manifestó: “Yo no quiero dejar pasar alegremente lo que se dijo acá, que estamos tocando derechos adquiridos; estamos reformando un sistema que es injusto y la injusticia e insostenibilidad la tenemos hoy”.
Asimismo, resaltó «la insostenibilidad económica financiera del sistema actual y el déficit que genera». Sostuvo que por ello es imprescindible reformar la Caja Militar, no sólo por el déficit que genera sino que «también en términos de justicia social» y enfatizó que «para el Frente Amplio la justicia social seguirá siendo un rumbo, un principio»
La senadora Constanza Moreira sostuvo que lo que explica el déficit es que “hubo una dictadura en la que los militares colonizaron el Estado”. “La salida en democracia fue negociada y seguimos teniendo un sistema regresivo, injusto e insostenible.” “El déficit no lo causan los soldados, los de abajo, sino los de arriba”, señaló. Puso como ejemplo que “todo el espacio fiscal planteado en la Rendición de cuentas es de U$S100 millones, mientras que el déficit de la Caja Militar es igual a todo el espacio fiscal de un quinquenio” “La Reforma es justa porque el gasto previsional militar es profundamente regresivo: beneficia a quienes más tienen, no a quienes menos tienen” y que “Es innoble que un país de nuestras dimensiones y sin conflictos fronterizos gaste dos puntos del PIB en las Fuerzas Armadas”, sentenció.
Para el senador Rafael Michelini “esta reforma es necesaria; los blancos en el gobierno no pudieron, los colorados tampoco” por lo cual es preciso hacer algo ahora para no afectar al próximo gobierno.
En tanto, Yerú Pardiñas indicó que “este proyecto sirve para solucionar uno de los tantos problemas que tiene el país. Y no se trata de ninguna cuestión ideológica o de revancha. Es una cuestión de estricta justicia e igualdad”. El legislador señaló que en la práctica, en la cotidiana del Sistema de Retiros y Pensiones Militares «Oficiales de alto rango se jubilan con más de lo que cobraban en actividad…. eso es un régimen de privilegio».
Marcos Otheguy expresó que “No es sostenible que en 2020 las transferencias lleguen a los 700 millones de dólares” y que “el sostenimiento de este sistema actual perjudica al que gana menos”.
La senadora Ivonne Passada destacó a propósito de las modificaciones que «este proyecto va produciendo un cambio que era necesario y hay que seguir profundizándolo.»
Finalmente, el senador Daniel Garín destacó que “aprobamos la reforma del Servicio de Retiro Militar, el único sistema previsional no reformado en 40 años, la oposición no vota, sin embargo parte de ella propone aumentar la edad de retiro para el resto de los trabajadores”.
Se han modificado el sistema del BPS, la Caja Bancaria y la Policial, tomando en cuenta la especificidad de la actividad laboral en cada caso, pero la Caja Militar es la única que permanece sin reformarse. La oposición sostiene que la propuesta de reforma está cargada de “ideología y pasado”. Efectivamente la postura del Frente Amplio es ideológica porque la justicia y la igualdad guían este proyecto. De lo que realmente se trata es de terminar con los privilegios y la falta de equidad.