
Orsi: Uruguay está en condiciones de ofrecerse al mundo como promotor del diálogo que conduzca a la construcción de la paz.
El mandatario afirmó, ante las Naciones Unidas, que el país está preparado para ese “reto cada vez más urgente y necesario”, y recordó las palabras del expresidente José Mujica cuando afirmó que la tolerancia es el fundamento para poder convivir en paz.



En su discurso, en el 80.° período de sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas, Orsi enfatizó que Uruguay condena toda forma de terrorismo porque constituye «una despreciable actitud de cobardía» y afirmó que debe dejarse de lado “el viejo precepto de que la guerra es la continuación de la política por otros medios”.
«Sabemos que desde el nacimiento mismo de las civilizaciones la ausencia de violencia o guerra es una quimera. Pero en nuestros días, los avances tecnológicos aplicados han desencadenado otras lógicas perversas, como el uso de prácticas militares destinadas a sembrar el miedo, el terror y la muerte en la población civil», afirmó.
Que quede claro, agregó Orsi. «Condenamos toda forma de terrorismo. La otra lógica es la que nos lleva a que el objetivo central en las guerras actuales pareciera ser la práctica sistemática del exterminio. El fin nunca justificó los medios».
Dijo que todo enfrentamiento bélico es criminal, más allá de geografía o religión que se busque para su justificación, y “siempre nuestra más visceral condena”, remarcó.
El mandatario explicó que en Uruguay la alternancia de los partidos políticos en el gobierno no se traduce en una crisis de carácter institucional: “es más: se constituye en un acto de pura normalidad”.
Subrayó que el país enfrenta desafíos en términos de pobreza infantil, seguridad pública o desigualdad social, y destacó que sobre estos temas también hay consenso nacional.
En esa dirección, afirmó que su solidez institucional y política ha permitido que Uruguay aún se destaque en la región por su alto nivel de desarrollo humano o sus políticas de distribución del ingreso. Añadió que es un país con reglas estables, donde los contratos se cumplen, se honran los compromisos internacionales y la estabilidad macroeconómica es una política de Estado.
«Venimos a sumar esfuerzos para contribuir con la paz»
El presidente Orsi sostuvo que Uruguay también es reconocido en el mundo por su vocación de paz, su incansable defensa de la solución pacífica de los conflictos, su respeto irrestricto al derecho internacional como la mayor garantía para la soberanía de los pueblos, y por ser una tierra fraterna y hospitalaria con los migrantes de todas las latitudes.
“Desde ese pequeño país, que cultiva la tolerancia, el diálogo y el acuerdo como clave histórica de convivencia, y que está inserto en un continente sin conflictos ni guerras entre Estados, venimos a esta Asamblea a sumar esfuerzos para contribuir con la estabilidad y la paz en un mundo cada vez más convulsionado y desafiante”, manifestó.
En este sentido, hizo referencia a la creciente tensión geopolítica y el aumento de conflictos en el mundo. «Ningún Estado que se precie de democrático y de vivir bajo el mandato del derecho internacional puede, aún bajo el legítimo derecho de defenderse contra el terrorismo, ejercer la barbarie sobre ninguna población civil, menos aún contra personas especialmente vulnerables e indefensas«, advirtió.
Y recordó que «Uruguay siempre sostuvo la posición de dos naciones, dos pueblos, dos Estados«. «El Gobierno uruguayo toma muy en serio los informes que la comunidad internacional elabora en relación a los territorios palestinos«, puntualizó.
“Instamos a implementar las recomendaciones formuladas por la ONU, e instamos a la suspensión inmediata de las operaciones militares, e instamos a la suspensión de las muertes de civiles inocentes e instamos a la liberación de los rehenes”, insistió.
Uruguay está en condiciones de promover redes de diálogo
En otro orden, el mandatario hizo referencia a la trayectoria del país en cooperación para la paz. A modo de ejemplo, mencionó que en 1907 el país llevó una postura firme a la Conferencia de La Haya sobre el arbitraje como mecanismo esencial y obligatorio para resolver conflictos entre Estados.
En 1921, Uruguay fue el primer Estado del mundo en aceptar la jurisdicción de la Corte Permanente de Justicia Internacional, predecesora de la Corte Internacional de Justicia, agregó.
El mandatario también se refirió a que en los últimos 35 años, y de manera ininterrumpida, el país ha desplegado batallones en diversas operaciones de paz de las Naciones Unidas.
“En función de estos y otros antecedentes históricos, me permito afirmar que Uruguay está en condiciones inmejorables de ofrecerse al mundo como anfitrión de negociaciones, como promotor de redes de diálogo y mediación, que conduzcan a la construcción de la paz y la prevención de conflictos”, señaló
“Como dijo el presidente de mi país José Pepe Mujica, la tolerancia es el fundamento para poder convivir en paz”, concluyó.
Discurso completo: